Cuando desperté esta mañana
mi cerebro palpitaba, golpeado y dolorido.
Nada de lo que intentaba funcionaba:
ni gaseosas frías, ni siquiera soda.
¿Qué es tan malo? Un poco de alcohol.
Nada es malo con un poco de alcohol.
Finalmente me levanté de la cama
sintiéndome confuso, me sentía medio muerto.
Lo he hecho antes y seguro lo haga de nuevo,
no sé si alguna vez aprenderé.
¿Qué es tan malo? Un poco de alcohol.
Nada es malo con un poco de alcohol.
¿Qué es tan malo? Un poco de alcohol.
Nada es malo con un poco de alcohol.
Comentarios
Deja tu comentario: