Un viernes, 11:10
¿Esta vez qué hago aquí junto a ti sosteniendo la lanza que te atravesó?
Me quiero erguir pero mi cuerpo pesado está
Carga de mi culpa que te lanceró
Precoro
Lágrimas brotando pido tu perdón, nunca te escuché
Tu sonríes y remueves mi maldad
Coro
Jesús llegas a mí, arrepentimiento lavando mis pies
¿Debería ser yo?
Veo en tus heridas nudillos hinchados de perseverar tocar mi puerta sin parar
¿Nunca te rendiste, hoy me rindo a ti, comprendo mi maldad, me vienes a levantar?
¡Se entregó en un acto de amor!
¡Fue Jesús que su vida dio al morir colgado en una cruz por expiación de nuestra maldad y perdonar la humanidad!
¡Por medio de Él ya no hay condenación!
¡Removió el dictamen de muerte y maldición
Se llevó el llanto lo cambió en danza, gozo y libertad!
Él paseando por aquí, va tocando puertas para invitar a una eternidad
¿Vamos cena en mí, cena de calvario vista a sanidad, bálsamo y Verdad? ¿Enjuagando tus pies, con las vestimentas de mi santidad?
¿Llorando tus manos te pido perdón?, te invito a cenar
¡Ven quédate aquí!
Me dices que a otros debes levantar debes restaurar
Me dices aún no es tarde para ir a salvar a la humanidad
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